No son pocas las empresas que pasan aceite cuando las economías se contraen como en este momento. Lo que suele suceder es que, posiblemente, muchas de ellas hayan estado navegando ante la inercia del mercado.
Cuando ha habido abundancia, las empresas han sido ineficientes y toma pedidos, pero cuando los ciclos económicos cambian, que siempre van a cambiar, es donde se ve quién realmente está preparado.
Aplica el dicho: Cuando la marea baja se ve quién es que el que anda nadando sin traje de baño.
¿Si era así, o lo escribí mal? La idea se entiende.
Todo tiene que ver con la oferta y la demanda. Algo que me lleva a acordarme de esos viejos debates que teníamos en la universidad, de qué estrategias usar para levantar.
Yo estudié Ingeniería Civil y éramos mayoritariamente hombres. Ante la poca oferta y la gran cantidad de demanda, si queríamos ser exitosos teníamos que aumentar nuestras habilidades.
Pero en psicología, al menos en mi época de la universidad, que ya cada vez se ve más lejos en el retrovisor, era todo lo contrario, más mujeres, muchas más, que hombres. Diría, no tendrías que ser tan hábil.
Y esto es lo que está sucediendo en el mercado, muchas empresas se quedaron sin desarrollar habilidades y operan, esperando que lleguen los clientes y los pedidos para seguir creciendo.
Precisamente por esto, te voy a contar cuáles, he visto yo, son los patrones de quienes consiguen navegar con éxito cuando las aguas están turbulentas:
- Creen. No son pocos los negocios que se acaban cuando están a punto de conseguir sostenibilidad financiera y se rinden. La duda hace que desistan.
- Tienen curiosidad intelectual. He visto mucha gente no tiene una metodología clara, pero viven queriendo aprender cosas nuevas. Tarde o temprano el camino les aparece. Por el contrario, están los que piensan, así es como lo he hecho toda la vida y así funciona. Estos últimos van camino al abismo.
- Accountability. Si tus resultados siempre son culpa de otro, jamás vas a aprender y por consiguiente a crecer. O eres victima o eres accountable.
- Mentalidad. Así como para conquistar la mentalidad era vital, para los negocios lo es aún más. ¿Qué tan fuerte es tu mentalidad? No se si sabías que los toreros no dominan al toro con su habilidad en el capote, lo hacen con su mentalidad y actitud, la sola forma de caminar hace la diferencia.
- Desarrollan sus habilidades. Saben que tienen que volverse los mejores en lo que hacen y están buscando hacerlo mejor cada vez. Muchos otros están viendo Netflix.
- Tienen mentores. Tienen muy claro que no se las saben todas y cuentan con la capacidad de levantar la mano y pedir ayuda. La vulnerabilidad es un super poder, pedir ayuda es lo que hacen los grandes.
- Invierten. Es una línea muy delgada que no es fácil encontrar ¿Cuánto debo invertir? Porque están quienes lo hicieron de más y están los que son más amarrados que un burro en bajada.
- Se atreven. A las personas y a las empresas las mata la falta de atrevimiento, los paraliza el miedo. Me decía Juan Felipe Penagos, que el cambio requiere energía y el subconsciente del ser humano busca preservar la energía, porque quedarse sin energía representa morir.
- No se resisten. La cantidad de personas que se encuentran con las alternativas que van a catapultar su negocio y se resisten, son atrincherados a sus creencias. Es como si en un día soleado no logras ver el sol porque abriste tu super sombrilla. El sol está ahí, pero eres tú, resistiendote a verlo.
- El foco. La puse en el puesto 10, pero es la más importante, posiblemente en la que yo más he metido las patas. Tener foco es bien difícil, pero cuando te convences de lo esencial que es, woooowwww.
Hay más, pero estas que te conté, me parecen las más claves.
¿Cuáles tienes ya implementadas o cuáles te faltan? Escríbeme.
Dale una mirada a La Gran Escuela de Ventas que vengo construyendo, muchas alternativas allí, para los marineros que quieren llevar a sus empresas a que les entreguen esos sueños, por los cuales una vez se animaron a hacerlo.
Abrazo apretado,
Miguel Rozo